La mitología ha sido siempre
uno de los aspectos del mundo clásico grecorromano que más ha influenciado en
las artes de todas las épocas. La literatura, el mosaico, la pintura, la
escultura, la música, la cerámica, … recrean e interpretan gran cantidad de
mitos.
Nos decantamos este año por
una recreación del mito de Las bodas de
Tetis y Peleo y los diferentes episodios que encierra: el banquete de los
dioses, la aparición de Eris lanzando a la mesa de los dioses una manzana de
oro con el texto ‘PARA LA MÁS BELLA’
y el juicio de Paris, el príncipe troyano que decidió entregar la manzana a
Afrodita al considerarla la más bella de entre las diosas, pero que, al mismo
tiempo, levantó la ira y la venganza de Hera y de Atenea contra Troya y sus gentes.
A partir del tema sobre
Mitología estudiado en clase, hemos comprendido por qué los griegos crean estas
historias, en qué momento de la historia surgen, qué sentido tienen, quiénes
las protagonizan y qué repercusión llegan a alcanzar en los siglos posteriores.
La elección del mito se debe
a su importancia para la historia de las polis griegas, a que da pie a explicar
la diferencia entre realidad y ficción, a que interviene el panteón olímpico
entero, a lo actual que resulta a los alumnos debido a la gran cantidad de
películas y documentales que tratan el tema y a que invita a hablar de
historia, religión, geografía, literatura, arte, sociedad, …
Una vez elegido el mito, lo
siguiente era ver cómo representarlo y, tras haber visto diversas opciones,
optamos por una actividad manual que ofrecía la posibilidad de ser atractiva,
vistosa, entretenida y lúdica y que nos ayudaría a conseguir diferentes
objetivos. A saber:
· Conocer
el panteón olímpico griego.
· Reconocer
los diferentes dioses de la mitología grecorromana según sus atributos.
· Ubicar
los mitos griegos en un espacio y un tiempo precisos.
· Valorar
la importancia del mito en el mundo griego y su repercusión en los siglos
posteriores hasta la época actual.
· Desarrollar
competencias esenciales como la creatividad, la originalidad, la
psicomotricidad fina, la estética y el humanismo.
· Potenciar
el valor didáctico del trabajo cooperativo, la expresión artística, estética y
cultural.
La orientación investigadora
implica una actividad planificada por el alumno y un control consciente de la
aplicación de la estrategia atendiendo a cuatro fases:
· Fijar
metas. En nuestro caso, conocer qué queremos representar y qué dificultades nos
vamos a encontrar en el proceso, valorando si son de fácil y pronta resolución
dentro del aula.
· Elegir
una secuencia de acción. Radica en decidir qué material es necesario, qué personajes
y paisaje se deben reproducir y cómo.
· Aplicar
la secuencia de acción. Consiste en buscar patrones, vídeos y moldes con los
que fabricar cada recreación.
· Evaluar
el logro de metas. Una vez acabado el taller, se evalúan los resultados
obtenidos, se analiza la opinión de padres, profesores, alumnos y visitantes
del blog. También es un indicador de logro el interés de los alumnos.
El procedimiento de
investigación de este trabajo se estructura en cinco fases:
· Adquirir
información a través de la lectura de los libros, los manuales, páginas webs y blogs
consultados, ya que sus conocimientos partían de cero.
· Interpretar
la información consultada para poder discernir su viabilidad del proyecto.
· Analizar
los datos obtenidos y determinar cómo representar a cada personaje ciñéndonos a
un presupuesto limitado.
· Comprender
la importancia de lo investigado con el fin de ajustarnos a los objetivos del
proyecto.
· Comunicar
de forma clara, precisa y concisa toda la información adquirida, interpretada,
analizada y comprendida.
El proyecto se ha asentado sobre
tres pilares principales básicos del aprendizaje cooperativo:
· Interdependencia
positiva. El hecho de que cada alumno se responsabilice de un personaje
propicia que el trabajo de uno sirva como complemento para el de los otros.
· Compromiso
individual. Ha sido crucial, ya que cada trabajo individual ha hecho a cada
alumno responsable único de su parte, sabedor de que es parte activa del proyecto
general.
· Fortalecer
las habilidades sociales. La comunicación entre ellos como método de trabajo ha
sido de apoyo como punto de partida para la coordinación, distribución y
presentación del proyecto, ya que el hecho de escuchar las opiniones y
reflexionar sobre el trabajo de los compañeros los ha educado en la tolerancia
y en el respeto por lo ajeno.
Para finalizar, debemos
apuntar que con el proyecto se han trabajado los pilares básicos indicados en
el Informe Delors para la formación de toda la vida:
· Aprender
a conocer. Es esencial aprender a aprender, ya que les ayuda a aprovechar las
posibilidades que ofrece la educación a lo largo de la vida y les proporciona
las herramientas básicas para poder hacer frente a estudios y conocimientos
posteriores.
· Aprender
a hacer. No sólo se ha perseguido adquirir una calificación profesional, sino,
además, la competencia que capacite a cada alumno a hacer frente a un gran
número de situaciones y al trabajo en equipo.
· Aprender
a vivir juntos. Se ha procurado aceptar y comprender al otro para poder
realizar proyectos comunes y prepararse para tratar los conflictos, respetando
los valores de pluralismo, comprensión mutua y paz.
· Aprender
a ser. Así hemos conseguido fortalecer la propia personalidad y la capacidad de
obrar con autonomía y responsabilidad personal y valorar la memoria, el
razonamiento, el sentido estético, las capacidades físicas, la aptitud para
comunicar, ...